Smart mobility
El concepto de smart mobility supera el de smart road. Y es que la movilidad inteligente es mucho más que una carretera con un elevado componente tecnológico. La infraestructura viaria no es solo el soporte del tráfico en automóvil privado. Por el contrario, la bicicleta, el autobús, el vehículo compartido, incluso la energía, son también parte de la vía, y para ellos también hay alternativas smart.
En este contexto, la smart city, alrededor de la que se mueve buena parte del desarrollo tecnológico en la actualidad, no se entiende sin unas carreteras inteligentes. A través del uso intenso de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC), la ciudad del futuro ha de ser capaz de conseguir una gestión eficiente y sostenible en todas sus áreas (administración, urbanismo, infraestructuras, transporte, servicios, educación, sanidad, seguridad pública, energía, etc.), garantizando que se satisfagan las necesidades de la ciudad, de sus instituciones, empresas y habitantes.
Así considerado, no puede existir la smart city sin una smart road. Estos dos conceptos, juntos, dan lugar a una verdadera smart mobility, que debe complementarse con el desarrollo intermodal, donde la carretera desempeña, una vez más, un papel claramente protagonista.